miércoles, 15 de junio de 2011

Las encendidas amapolas

Granado en flor. Foto RMV


La revolución de las encendidas amapolas,
En tus incoloros fluidos adormecidos,
Se han asentado pacíficas y silenciosas,
Mientras en tu sueño de invocada siesta,
Permanecías sumida en el hondo letargo
De un extraño misterio que no conocías.
 
Me llegaban altaneros e impetuosos
Los aromas de tu cuerpo inquieto,
Que se estremecía en espasmos de asombro,
Como si tus muslos fueran hojas tiernas
De elevados y curtidos abedules,
Añorando los tenues y suaves vientos
De primaveras floridas y rabiosas…,
De aquellos esplendores de un principio,
De paraísos antiguos y del tiempo olvidado.

Eran tus impulsos latentes de hermosa hembra,
Sembrada de pasión y de florida vida;
Mientras, a la espera permanecías paciente,
En la ventana entreabierta de tu profundo deseo,
Apenas olvidado, nunca dominado, en resignación lenta,
Adivinando la llegada de la voz del trueno,
Y de mi llamada de atrevido halcón peregrino,
Que observaba la danza alocada de tus caderas
Y el ritmo acompasado de tu pecho alborotado,
En los aires inciertos de los besos húmedos,
Que ofrecían tus labios pintados de miel
En la sed controlada de años de sequía.

Mi llegada te inundó de temblores el alma,
Mientras renunciabas a tu latente castidad,
Esa que permanecía en el cofre de blanca plata,
En ese tenue rincón de la contenida paciencia.
Abriste tus brazos en cálido abrazo desesperado,
Abandonando tu cuerpo entero en el mío lento,
Y recibí asombrado ese peculiar fuego tuyo…,
Ese que habías heredado de todas las mujeres pasadas,
Desfallecidas y agotadas en su amor contenido…,
De bondades desinteresadas y gratuitas.

Y al sentir la olvidada ternura de mi abrazo,
Tu inquietud alcanzó suave la tibia calma,
Del deseo satisfecho en tu íntima esencia,
Sintiendo la conquista definitiva del placer único,
Ese que nunca habías conocido en tus sueños.

Así fue tu primera  y exclusiva noche de amor.
Luego, con pena en los recuerdos dolidos,
Volviste a tu mundo de ausencia y espera,
Para escuchar la amarga canción de despedida,
Mientras emprendías el regreso penoso,
A los sueños de otros  tiempos.

©Rafael Mulero Valenzuela
Madrid 15 de junio de 2011



11 comentarios:

  1. Amigo Rafael,
    He cambiado el PC de sitio, para tener a la vista al granado que florece al pie de mi ventana. He aquí el primer impacto de tu poema, el segundo, que fue el primero y un grito, puede resumirse así: ¡Hostia que bonito!
    Un abrazo.

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  2. Querido, qué puedo decir frente a esa revolución de encendidas amapolas. Un diálogo interior lleno de amor, ternura, sensibilidad y erotismo. Lo he desmenuzado hasta la saciedad, hay imágenes bellísimas y me encanta tu forma de contarlas.
    Creo que sentí algo parecido al grito de Alloza.
    Besos de los que quieras soñar. (Precioso eso de labios pintados de miel)

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  3. Una cascada de pasión
    son estas encendidas amapolas
    mezcla de deseo y añoranza.

    Un gran poema.

    Un gran abrazo

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  4. Querido Rafael

    Yo no se expresar lo que realmente he sentido al leer este poema, sencillamente genial, mucha pasión, mucho sentimiento tratado con una elegante exquisitez.

    Besos

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  5. Apasionado y hermoso poema, pleno de sensualidad, con un toque de tristeza que lo enriquece. Un abrazo.

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  6. Que belleza de poema, de encarnas amapolas. Uno de los espectáculos más hermosos de la llegada del verano. Campos y campos de trigo decorados con incendiadas amapolas. El amor a veces se vence, pero todavía nos puede quedar el recuerdo de su intensa luz.

    Muchos besos amigo

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  7. Querido Rafael, bello poema, que no me sorprende de ti, pues, eres un gran escritor.
    Bello, bello...y elegante poema.
    Recibe un fuerte abrazo.

    Tu siempre amiga que te quiere...

    ~Charo Bustos~

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  8. que tal..! pasaba a saludarte
    y a invitarte a pasar por mi blog..
    he subido un texto nuevo..
    te dejo un fuerte abrazo!!!

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  9. Me ha parecido entrever entre tus versos una amapola sensual y apasionada, atrevida y alocada
    que ha hecho estremecer, lo pienso, lo mas hondo de mi alma.
    Hermoso poema querido Rafael,gracias por esa ternura que despiertas en cada verso, en cada vaiven de la amapola.
    Un fuerte abrazo.
    Deseo que te encuentres mejor.

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  10. Rafael mucho tiempo sin publicar nada, espero que estés bien de salud y escribas un nuevo poema, eso sí te pido un favor que no sea muy triste.Besos

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