martes, 7 de diciembre de 2010

Danza ante el ciprés


Mi perra Tuska


En las manos he encontrado soledad
Y la he visto sin antes haberla sentido
Como otras veces, mordiéndome los huesos,
Fríos. Revolcándose en el pecho seco.

Con desesperada ansia he buscado
Los ojos de una mujer, para sonreír,
Aunque lo hiciera con tristeza
Intentando por instante desterrar la pena

Nadie me ha mirado.
He corrido calle abajo
Como aterrorizado, fugitivo, perseguido,
Sabiendo que ningún crimen había cometido,
Para contárselo a la sombra del ciprés.

Allí he llorado como un niño perdido.
Ha llegado el perro solitario de la noche
Moviendo tímido su rabo alborotado,
Esperando la caricia para lamer mi mano.

La vergüenza de nuestros amargos gemidos
Se ha quedado refugiada en sombra sorprendida,
Por si algún día deseamos recuperarlos
Para mostrársela a nuestro viejo hermano.

Después perro y hombre hemos corrido,
Buscando alocados, algo aturdidos,
Un rayo de luna que permitiera identificarnos,
Para bailar nuestra congoja como borrachos,
Sin fijo destino, como canarios enjaulados.

La magia de nuestra danza sin límites
Ha quedado sembrada en la yerba extrañada,
Que muda y silenciosa nos ha arropado.

Despacio, cautelosos, con miedo en los huesos,
Hemos vuelto a visitar al ciprés, altanero y austero,
Para decirle que no nos espere esta noche
Que tenemos vida por delante.
Pero nos hemos callado lo que sabemos
Que una pena y una lágrima nos traen la muerte.

Diciembre 7 de 2010

10 comentarios:

  1. Amigo Rafael, poeta, quiero ser el primero en felicitarte por este espléndido poema. Seguramente lo has escrito pensando en una fase de tu vida muy anterior, pero ahora yo creo que has podido visitar ese ciprés con alegría, porque tu vida en estos momentos es muy buena. Salvaste momentos físicos muy críticos y te recuperaste interiormente de otros malos episodios. Eso demuestra que tienes una fortaleza excepcional, tanto en el cuerpo como en el alma. Y además, puñetero, escribes unas poesías buenísimas. Debe ser que el Café de las Sorpresas te inyecta algun medicina curativa y te permite fumarte una pipa con tus amigos, los "rechazados". Una verdadera pipa de paz interior. Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Creo que Fernando ha dado en la diana. Es un poema muy hondo. Y me encanta tu perra Tuska; ella será tu mejor compañía en los malos momentos, silenciosa y atenta a tus manos.
    Besos, sin trstezas, amigo.

    ResponderEliminar
  3. Espero que en la visita que hagas a esa sombra del ciprés, siempre lleves una sonrisa por sombrero y, la soledad y la tristeza debajo del zapato.
    Me ha conmovido tu poema, amigo, versos espléndidos que, al final de esa sombra, desprenden mucha vida por vivir.

    Un fuerte abrazo y deseo de que todo esté en su sitio.
    Besos.

    ResponderEliminar
  4. Profundo y desgarrador poema.Me ha encantado el poema.Espero que no te muerda soledad ninguna y que tu perra Tuska y la poesía te acompañen siempre a la sombra del ciprés y te sonrian.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Cuando el sufrimiento pasa
    llega la fortaleza de espíritu
    que todo lo puede.
    Tuska y tú danzareis a la sombra
    del ciprés sin temores,
    en la certeza de que la vida
    sonríe.

    Un abrazo muy grande.

    ResponderEliminar
  6. Querido Fernando: mis amigos los "rechazados" los tengo en la más alta estima y más si me hacen comentarios tan bondadosos como el tuyo. Te puedo decir que yo nunca caeré en la tentación de rechazar a ninguno de ellos. Lo malo de todo esto es que mientras fumo mi pipa me asaltan las ideas y así nunca voy a conseguir abandonarla. Un abrazo y muchas gracias.

    ResponderEliminar
  7. Querida Isolda: dar en la diana para Fernando nunca es dificil porque además de buen escritor y poeta es sagaz en sus apreciaciones. Te diré que Tuska ya entiende mi mirada y como tú bien dices permanece atenta a mis manos. Gracias por tus besos sin tristeza que para eso parece que me valgo bien no como en los poemas. Gracias por visitarme. Muchos besos, amiga.

    ResponderEliminar
  8. Querida Marisa: elespejodelaluna me hizo danzar aquella noche alrededor de la sombra del ciprés pero no llevaba el sombrero que me compré en Salamanca aunque ya lo tengo adornado con miles de sonrisas siguiendo tu valiosa recomendación. Te agradezco mucho que me visites pues siempre, como a otros compañeros, siempre os añoro. Un beso tibio para no empañar tu espejo.

    ResponderEliminar
  9. Querida Carmela: En primer lugar felicitarte por ese magnífico puesto obtenido en el concurso. Espero que el libro sea todo un éxito. Ya me avisaras cuando esté disponible. Pero si se va a demorar no dejes de visitarme. Un beso.

    ResponderEliminar
  10. Querida Xanela: qué alegría me proporciona tu visita. Tienes un blog fantástico que me encanta que visito aunque a veces no haga comentario alguno.Tienes razón y realmente no sé de qué me quejo porque la vida me sonrie y más cuando recibo tu comentario. Un beso

    ResponderEliminar